Si crees que tu hijo, hija, esposo, esposa o un familiar tiene un problema adictivo (adicción a las drogas, al alcohol, al juego, a la comida…) hazle entender que necesita ayuda profesional y que tú estás a su lado. Es necesario ser delicado pero claro y contundente. Ponle límites. Aquí te explicamos cómo hacerlo:
1 Las conductas adictivas afectan emocionalmente al círculo más cercano.
La adicción no afecta solo a la persona que la padece sino también a toda su familia. Este problema empieza a implicar a los miembros de la familia, alterando todo el funcionamiento del entorno.
Lo normal es que si tienes un familiar adicto a las drogas te involucres e intentes ayudarlo o ayudarla. A veces esta actitud puede resultar contraproducente. Cuando sacrificas tu propia vida y tu propio bienestar para rescatar y ayudar a tu familiar, no se suelen conseguir los resultados deseados. De hecho se crea un nuevo problema conocido como codependencia.
2 Habla de la adicción cara a cara y establece límites claros.
Siéntate con el familiar que esta en problemas o que sufre una adicción, háblale de tí en primera persona sin culpabilizar y explícale tu preocupación y en qué te afecta su problema. Ponle límites. Por ejemplo: hasta que no ponga atención a su problema adictivo no podrá entrar en casa o no le ayudarás económicamente.
3 Sé firme y hazle comprender que necesita ayuda profesional.
Tener una actitud tan firme es muy difícil para las personas queridas, pero es completamente necesario. Lo importante es hacer tomar conciencia a la persona de que necesita ayuda.
Dile que te acompañe a un especialista. Si no quiere, hazlo tú. Al final se sentirá presionado y accederá a dejarse asesorar por un experto para superar su acción.
4 ¿Quieres más información o hacer una cita con un especialista?
Si quieres más información o concertar una cita, llama al Lic Eduardo Houellemont, teléfono 809-542-2022, lunes a sábados (9am a 1pm y de 2pm a 6pm, sábados sólo de 9am a 1pm).